Triple homicidio en zona rural de Riohacha: entre las víctimas, un excombatiente del ELN y su escolta de la UNP

Un nuevo hecho de violencia sacudió la zona rural del municipio de Riohacha, en La Guajira, luego del hallazgo de tres cuerpos sin vida en el kilómetro 20 de la vía que conduce hacia Cuestecitas.

Las víctimas, que presentaban múltiples impactos de arma de fuego y tenían las manos atadas, fueron asesinadas en circunstancias que ya están siendo investigadas por las autoridades.

Entre los fallecidos se encuentra Jerson Andrei Sanguíneo Avendaño, un exintegrante del Frente de Guerra Nororiental del ELN, desmovilizado en 2018. Sanguíneo, quien habría sido testigo protegido de la Fiscalía en un caso aún por establecer, ya había sido blanco de dos atentados previos: uno mediante el lanzamiento de una granada en abril de 2024 en Cúcuta, y otro en diciembre de 2023, cuando fue presuntamente secuestrado en Tibú.

La segunda víctima fue identificada como Boris Omel Rodríguez Alandete, escolta de la Unidad Nacional de Protección (UNP), residente en Maicao. Rodríguez se encontraba a cargo de la seguridad de Sanguíneo desde el pasado 28 de junio, en reemplazo del escolta titular que se encontraba en vacaciones.

La tercera persona asesinada aún no ha sido identificada por las autoridades.

En el lugar del crimen fue hallado un vehículo Hyundai Elantra de placas BBK570, al parecer propiedad de Rodríguez. El automóvil tenía grafitis alusivos al Clan del Golfo, con la inscripción «Presente EGC», lo que refuerza la hipótesis de la posible participación de estructuras criminales en el hecho.

De acuerdo con testigos de la comunidad indígena Los Remedios, al lugar llegaron dos motocicletas y un vehículo, desde los cuales descendieron hombres armados que perpetraron el ataque.

La zona es de influencia del Grupo Delincuencial Organizado (GDO) Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada (ACSN) y del Grupo Armado Organizado (GAO) Clan del Golfo.

Un equipo interinstitucional conformado por unidades de la SIJIN, SIPOL y el Grupo de Operaciones Especiales (GOES) se desplazó hasta el sitio para iniciar las labores de investigación y levantamiento de los cuerpos.

Las autoridades aún no han emitido un comunicado oficial sobre los móviles del crimen ni sobre los posibles responsables.